Sin duda si pensamos en París, lo primero que se nos viene a la cabeza es la Torre Eiffel, sin duda el símbolo de la capital y de toda Francia podríamos decir.
Desde cada rincón de la ciudad se puede ver, por lo que lo importante es apreciarla a las mejores horas del día… o de la noche.
En este caso os presento una fotografía justo después del atardecer, entrando en la hora azul, con un cielo bonito detrás, no era espectacular, pero sí que creo que venía bien para esta fotografía pues no competiría por el protagonismo, sino que añadiría color a la foto.
Esta foto está compuesta de 5 fotografías en ráfaga con el mismo encuadre y mismos parámetros realizadas a pulso sin cambiar el encuadre. He utilizado esto para bajar el ruido al mínimo.
Espero que os guste.
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